Descubrí el fútbol en el campo de arena de mi colegio, San Viator. Dedicidí que quería ser futbolista en Zubieta. Lo intenté en Girona. Crecí en el Real Unión. Vestí la camiseta del Eibar y me ilusioné en Las Gaunas. Durante 9 temporadas he vivido eso que un día soñé en aquel campo de arena: defender los colores del Deportivo Alavés. Disfrute del fútbol chipriota en el Aris Limassol y pude volver a jugar delante de mi gente en el CD Mirandés.
Tras superar todos mis sueños, es momento de mirar al futuro.